CUANDO DIOS ES TODO LO QUE TENGO

“Dios es todo lo que tengo”

Cuando perdí un ser querido
Cuando me diagnosticaron una enfermedad terminal
Cuando mis hijos, esposo, esposa o compañero me han abandonado
Cuando perdí mi trabajo y mi casa
Cuando la depresión y la ansiedad dominan mi pensamiento
Cuando el dolor físico es mayor de lo que puedo soportar
Cuando parece que no vale la pena continuar viviendo

Cuando todas las teologías o doctrinas
de siglos de historia religiosa no pueden dar consuelo o solución a las grandes
interrogantes de la vida es cuando Dios se convierte en todo lo que tengo.
Hacer teología o filosofar lejos del dolor humano puede convertirse en un
ejercicio que continúe alimentando prejuicios, discrimen y marginación. Salir a
encontrarnos con el sufrimiento humano como hizo Jesús nos permitirá descubrir
qué es lo que da sentido a la vida y nos motiva en medio de las más terribles circunstancias
para continuar luchando. Por eso, cuando escucho a alguien decir “Dios es
todo lo que tengo” aun en medio de panoramas nefastos donde parecería no
haber esperanza, reconozco que estoy ante alguien que ha conocido a Dios.

Grandes multitudes seguían a Jesús
buscando milagros para los males que no tenían solución; sin embargo, Jesús no
solo obraba milagros sino que se sentaba a enseñarles lleno de compasión. Las
multitudes de fanáticos se convertían en ovejas por quienes El sería capaz de
dar su vida. La popularidad de Jesús amenazó su ministerio al
punto que en ocasiones se escondía para poder descansar sin ser visto, pero en
la medida que miraba la necesidad de la multitud, una gran compasión le permitía
mantenerse enfocado en su misión.

La compasión de Dios se encuentra a
través de Jesús con nuestra necesidad para derrumbar la tradición religiosa que
en tantas ocasiones ha marginado, matado y destruido. En medio de nuestras más
grandes angustias es cuando nos tornamos a decir: Dios es todo lo que tengo. En
medio de nuestro mayor sufrimiento ninguna palabra humana que no esté acompañada de compasión podrá dar sentido ni
esperanza al ser humano porque solo el lenguaje del Amor puede hablar al
corazón para dar esperanza.

“Y salió Jesús y vio una gran
multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían
pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas.”
 (Marcos 6:34)

Enlaces recomendados:
Iglesia Siglo 21
Lupa Protestante
Vicios, Virtudes y Valores

 

¡Gracias por su vista!

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

Website Powered by WordPress.com.

Up ↑

%d bloggers like this: