Quién te espera: Un Encuentro Restaurador

Muchas veces nos vemos retratados en la actitud de los discípulos, regresamos a nuestra antigua manera de vivir cuando nuestros planes y nuestras esperanzas han sido frustradas. Después de la muerte de Jesús Pedro dije: “Voy a pescar”, y otros lo siguieron. Es una frase cargada de resignación, como quien busca llenar el vacío dejado... Continue Reading →

Por qué mi Dios es también Madre

Limitar a Dios dentro de una visión antropomórfica y patriarcal ignora la grandeza ilimitada de "Su Ser" en relación con las limitaciones humana. Mi Dios es Padre y Madre porque llamándole Madre no tengo nada que perder y sí mucho que ganar. No pierdo poder pero sí gano igualdad y dignidad.

¡Hágase!

Que esta cuaresma sea una de aprender a estar despiertos ante la necesidad del otro y de ejercitar nuestra confianza en el Padre que es Abba porque es íntimo y cercano. En Sus manos podemos saltar confiados porque salva.

Cuál es mi cruz

Cuando Jesús nos pide que tomemos nuestra propia cruz no lo hace para fomentar el sufrimiento como estilo de vida. Lo hace como parte de la vida del discípulo que sabe que mas allá del sufrimiento, en Cristo hay algo mejor.

Cuidado con las excusas

Mientras miremos la paja en el ojo del otro para justificar nuestras acciones o nuestra falta de acción, la viga en el nuestro continuará creciendo y nuestro terreno se continuará secando.

El corazón de Dios

Tu vives, yo vivo y viviremos con Cristo eternamente porque Jesús nos mostró el verdadero corazón de la ley, honrar a Dios amando al prójimo. En palabras de Ireneo en el segundo siglo “la gloria de Dios es que el hombre [Sic] viva”.

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